Nuestros Ingredientes

Manteca de Karité:

El beneficio más importante de la manteca de karité es su capacidad de hidratación, pero también las propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Es perfecta para evitar la formación de estrías y activa la curación de heridas, gracias a su poder cicatrizante. Protege la piel de las agresiones externas gracias a una película invisible que también evita la deshidratación, al mismo tiempo que previene el envejecimiento de la piel gracias a la acción de la vitamina E, que ataca a los radicales libres.

Miel:

La miel se ha utilizado durante siglos en la industria del cuidado personal debido a sus propiedades hidratantes, anti-bacterianas y antioxidantes.  La miel se utiliza para hidratar la piel, suavizar la textura y mejorar la elasticidad. Contiene antioxidantes que ayudan a proteger la piel de los radicales libres y prevenir el envejecimiento prematuro de la piel. Ayuda rápidamente a mejorar las pieles enrojecidas, irritadas o resecas. Mejora pequeñas imperfecciones e inflamaciones de la piel y tiene un efecto limpiador. Es un producto de valor nutricional alto con propiedades regenerativas debido a su alto contenido en carbohidratos, la presencia de AHA’s  que son responsables de sus efectos nutricionales y regeneradores.

Propóleo:

El Propóleo es rico en Biosabonoides que aportan una acción antiséptica y garantizan una higiene perfecta de la piel, contiene Ácido Caseico que tiene una Acción anti-fúngica y Flavonoides que se encargan de regenerar el daño celular vegetal. Las personas que tienen pieles sensibles y con rojeces pueden beneficiarse con productos que lo contengan por su característica antiinflamatoria y porque refuerza la barrera natural de protección de la piel. Es perfecto para las pieles grasas y con imperfecciones. Limpia en profundidad y rejuvenece la piel, pero es precisamente por su capacidad cicatrizante y regeneradora que se convierte en un gran aliado de las pieles que tienen marcas de acné o cualquier otro tipo de cicatriz, ya que ayuda a disimularlas.

Aceite de semillas de lino:

Es perfecto para tratar irritaciones de la piel, inflamación del tejido dérmico y enrojecimiento. Combate manchas en la piel y quemaduras solares: es uno de los remedios más efectivos para curar quemaduras y cicatrizar heridas, ya que favorece la regeneración de tejidos de la piel. Además, consigue aclarar las manchas provocadas por las radiaciones solares.Por otro lado, combate el acné. Pese a ser un aceite, al tratarse de un ingrediente 100% natural el organismo lo asimila más fácilmente por su semejanza con los aceites naturales que la piel genera. Devuelve vitalidad a nuestra dermis: el alto poder nutritivo e hidratante del aceite de lino permite que nuestra piel se vea saludable y suave. Combate las arrugas, el envejecimiento prematuro, la piel fatigada, reseca y apagada, a la que devuelve la vitalidad perdida para que luzca radiante.

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